martes, 20 de marzo de 2018

ESQUICIO: plano-montaje

En el día de ayer, desplegamos en el taller del TFC nuestros tableros de disección para los PLANO-MONTAJES… y en el devenir del JUEGO, bien valen este pensamiento de MICHEL  FOUCAULT en relación a ¿qué es un autor? y de ahí preguntarnos quién es el autor y su virtual desaparición en el juego del sujeto que sujecciona sus reglas y representaciones…

"Tomo de Beckett la formulación del tema del que quisiera partir: “¿Qué
importa quien habla, dijo alguien que importa quien habla?”. En esta indiferencia,
creo que hay que reconocer uno de los principios éticos fundamentales de la
escritura contemporánea. Digo “ético”, porque esta indiferencia no es tanto un rasgo
que caracteriza la manera en que se habla o en que se escribe; es más bien una
especie de regla inmanente, retomada sin cesar, nunca aplicada completamente, un
principio que no marca la escritura como resultado sino que la domina como
práctica. Dicha regla es muy conocida como para que sea necesario analizarla
demasiado; baste aquí especificarla por medio de dos de sus grandes temas. Puede
decirse, primero, que la escritura de hoy se ha librado del tema de la expresión: sólo
se refiere a sí misma, y sin embargo, no está atrapada en la forma de la interioridad;
se identifica a su propia exterioridad desplegada. Esto quiere decir que es un juego
de signos ordenados no tanto por su contenido significado como por la naturaleza
misma del significante: pero también que esta irregularidad de la escritura se
experimenta siempre del lado de sus límites; siempre está transgrediendo e
invirtiendo esta regularidad que acepta y a la cual juega; la escritura se despliega
como un juego que infaliblemente va siempre más allá de sus reglas, y de este modo
pasa al exterior. En la escritura, no se trata de la manifestación o de la exaltación del
gesto de escribir; no se trata de la sujeción de un sujeto a un lenguaje: se trata de la
apertura de un espacio en donde el sujeto que escribe no deja de desaparecer."


Agradecemos por el material fotográfico a Martín Cohen.
























miércoles, 14 de marzo de 2018

INSCRIPCION COMPLEMENTARIA: Lunes 19/3

El próximo lunes 19/3 se abre la inscripción complementaria para todos los niveles de Arquitectura!
LOS ESPERAMOS PARA TENER UN GRAN AÑO EN EL TALLER!
un saludo cordial!

TALLER AVB






martes, 13 de marzo de 2018

ESQUICIO: El Huésped

Dimos inicio al taller del TFC con el esquicio el Huésped el pasado jueves 8.
Mostramos un video con una de las secuencias en clase del ejercicio, más algunas fotos, y una selección de los resultados de las diferentes etapas (tres) que tuvo la experiencia acontecida en el taller.
Finalmente nos pareció apropiado incluir una de las memorias al final del posteo.

Agradecemos por las fotos y el video a Martín Cohen.
(1) memoria de Pablo Feijóo.






















…¿Quien es un autor?..., se pregunta y plantea Michel Foucault, dando una explicación adormecedora  y de faustos fundamentos, con un gran esfuerzo por convencer a quien lo lea o escuche, un viaje infinito de idas y vueltas, con saltos insalvables, utilizando a su vez  nombres de autores, para justificarse, es como si quisiera explicar que es, una piedra, diciendo que una piedra, es una piedra, será acaso que los citó, para jactarse de sus conocimientos, su erudición, porque estaba fascinado con ellos, o por envidia?, una explicación donde la esencia se evapora por la densidad de su diatriba.
Filosofía, muerte, autor, tesis, hipótesis, ego, Freud, Sócrates, Sade, poco espacio queda para la verdad. Y en este caso la verdad no es mas que la obra. Al pararnos frente a la obra la pregunta de, quien es el autor?, se desvanece rápidamente, no es importante, pero si la obra y el impacto que nos ocasiona.
A primera vista en el esquicio, nos encontramos con un mundo ajeno, la obra de otro, algo similar al mundo de David Hume del cual habla John Wilkins, …el mundo es tal vez el bosquejo rudimentario de algún dios infantil, que lo abandono a medio hacer…, y es ahí donde nosotros como nuevos autores intervenimos, tratando de entender, de subsanar aquello a lo cual no le encontramos solución o significado aparente. Como si fuera el David a medio terminar, seguimos esculpiendo la obra sin saber si esta parado o sentado, con algún harapo o completamente desnudo. El tiempo se termina y abandonamos la obra, tal vez nuevamente inconclusa.
Volvemos a nuestra primer obra, aquella que fue intervenida, ya sea mutilada o sobrecargada por completo, por otro autor, dado que el equilibrio es algo impensado, puesto que dos mentes separadas trabajando, son como dos manos sin un torso que las una.
Asombrados y pasmados, quedamos paralizados ante la nueva obra, …quien es el autor?, Foucault se vuelve a hacer presente, intentando taladrar con su pregunta, pero nuevamente, el enfoque es el equivocado, la obra lo es todo.
Lo esculpido por uno sumado a lo esculpido por otro hacen a la obra, con una intención, casi inocente, de tratar de armar un rompecabezas, de dos tipos diferentes tal vez, en esta ocasión haya que darle la razón a Foucault, cuando dice, … apenas esbozados, todos estos agrupamientos se deshacen, porque la ribera de identidad que los sostiene, por estrecha que sea, es aun demasiado extensa para no ser inestable, y al infinito el enfermo junta y separa sin cesar, amontona las diversas semejanzas, arruina las mas evidentes, dispersa las identidades, superpone criterios diferentes, se agita, empieza de nuevo, se inquieta y llega, por ultimo, al borde de la angustia. (1)